¿Qué hemos aprendido sobre el cuidado del planeta y cuál va a ser nuestro compromiso en su cuidado?. Este es un asunto que nos afecta a todos, por lo tanto es importante poner en práctica este conocimiento.
A largo de las publicaciones hemos ido aprendiendo sobre los tipos de contaminación creada por el hombre como son:
1. Contaminación por plástico. Tal vez la más conocida, ya que todos hemos visto la cantidad de este en calles, océanos y playas.
Se estima que cada año a los océanos llegan 6 millones de toneladas de plástico que amenaza la vida marina y la salud humana. Al consumir pescados, mariscos, sal común contaminados con los tóxicos que desprende el plástico.
2. Contaminación por fármacos. Es la contaminación del medio ambiente causada por los medicamentos. Al arrojar medicamentos a la basura, por el inodoro o por el lavamanos estamos causando un gran daño.
Estos medicamentos van a parar a ríos y fuentes de agua donde viven y se alimentan peces y otros animales que se están viendo amenazados por estos químicos.
Entre las consecuencias de este tipo de contaminación están el declive de algunas especies; rechazo de peces hembras hacia machos por comportarse como hembras debido a los residuos de anticonceptivos y terapias hormonales; animales con daños en sus órganos, por nombrar algunos.
3. Contaminación Acústica. Este tipo de contaminación afecta tanto la superficie de la Tierra como los océanos y la vida que los habita. En el mar muchas criaturas se comunican por sonidos, pero el ruido de los barcos ahoga esos sonidos poniendo en riesgo la supervivencia de especies. Otra cosa que han encontrado es que algunas especies nadan lejos del ruido, lo que reduce el espacio en el que se mueven y la cantidad de alimento.
4. Contaminación Lumínica. Causada por el exceso de luz al igual que por luces innecesarias o inadecuadas, principalmente la del alumbrado público y del exterior de los hogares.
Este tipo de contaminación nos afecta a los seres humanos ocasionando insomnio, depresión, obesidad y en los animales provoca desorientación en aves migratorias; disminución de la población de insectos nocturnos; menor polinización nocturna y otras afectaciones.
La industria textil se ha convertido en la segunda más contaminante después del petróleo, ya que para hacer una camiseta se requieren hasta 700 galones de agua y para unos jeans se utilizan alrededor de 1.800 galones.
Esto va ligado a la moda que cambia cada 3 o 6 meses, por lo que muchas prendas de vestir van a parar a los basureros. El 95% de estas podrían ser recicladas o reutilizadas al ser vendidas en un almacén de ropa usada con lo cual se evitaría más de 700 millones de libras de ropa corrieran la misma suerte.
Residuos de aparatos eléctricos y electrónicos. Se trata de aparatos que dejan de funcionar o se vuelve obsoleto o inservible que cada año suman millones.
En esta categoría entran televisores, cepillos de dientes eléctricos, herramientas eléctricas, teléfonos, cámaras, teléfonos móviles, tabletas, computadores, computadores portátiles, equipos de música, etc.
Aparte de los diferentes tipos de contaminación tenemos otros comportamientos humanos que están ocasionando mucho daño al medio ambiente como el de arrojar colillas o filtros de cigarrillos y chicles en las calles.
Colillas o filtros de cigarrillo. Es el elemento que más se arroja a las calles y también en las playas. Su contenido plástico, 95% es celulosa de acetato, por lo general va acompañado de un poco de tabaco y sus toxinas, que al ser arrojados en aceras, jardines, calles son arrastrados por las lluvias hasta las alcantarillas e inevitablemente van a parar a ríos y a los océanos afectando a animales y plantas.
En un estudio hecho en la Universidad de san Diego se introdujo un filtro de cigarrillo con restos de tabaco en un litro de agua, dando como resultado altos niveles de toxicidad y la muerte del 50% de los peces que estaban en el agua.
Chicles. Es el segundo elemento que más se arroja en las calles. Se elaboran de plástico sintético, por lo que se ha convertido en un peligro para las aves que los confunden con alimento.
El trabajo para despegar estos chicles involucra gran cantidad de agua y químicos que van a parar a los océanos con las consecuencias anteriormente mencionadas.
Para que tengan una idea, en Londres en el año 2012 se tardaron 3 meses, en menos de 3.2 kilómetros (2 millas) de calles, para eliminar 300.000 chicles, a un costo de entre 16 centavos y $3 dólares por cada uno de ellos.
Globos. Los globos que se sueltan al aire como parte de alguna ceremonia o porque se ve bonito, sin tener cuenta el peligro que representan para la fauna y el medio ambiente.
Los globos, de látex y de mylar (metalizados) que se sueltan al aire viajan distancias muy largas, cayendo al suelo, en ríos, lagos, océanos, incluso en lugares remotos y vírgenes.
El problema radica en que se supone que los globos de látex, son biodegradables, sin embargo la realidad es que tardan entre 6 meses y 4 años en descomponerse convirtiéndose en un riesgo para la fauna.
Las cintas con que van atados los globos tampoco son biodegradables y los animales que se enredan con ellas a lo mejor no puedan comer o moverse y en cualquiera de los dos casos les ocasiona la muerte.
Cuando estas cintas se enredan en cables de la electricidad provocan cortes de energía que perjudican a un gran número de usuarios.
Todos estos asuntos, ocasionados por el hombre, son responsables del Cambio Climático, cuya consecuencia es el Calentamiento Global, por lo tanto de nosotros depende detener este daño.
Debemos procurar tener el menor impacto en el planeta y esto se logra siendo más conscientes de nuestros actos y actuando en consecuencia.