El planeta en que vivimos es tan rico y diverso que todavía desconocemos mucho de los seres que alberga y su papel en los ecosistemas.
Los océanos solo se han explorado entre el 5 y 10 %, por ese motivo llevo un tiempo compartiendo en Instagram y en Facebook sobre los seres que habitan bajo la superficie del agua.
Especies fascinantes que juegan un papel importante en el ecosistema. Algunas especies sirven de refugio, otras prestan diferentes servicios o son parte de la cadena alimenticia de las otras, con lo cual se mantiene el equilibrio.
Al igual que bajo el agua, bajo la tierra también hay vida, muchos son microorganismos que están haciendo su parte en este gran engranaje.
En el planeta Tierra todo tiene una razón de ser, un por qué y un para qué, así no nos demos cuenta.
La naturaleza del planeta Tierra
El planeta azul, como también lo llaman, es extraordinario, hermoso y sorprendente.
Su naturaleza es tan vasta que todavía al día de hoy se siguen descubriendo nuevas especies a lo largo y ancho de la tierra y en sus océanos, tanto de fauna como de flora.
Lo triste es que al mismo tiempo se están extinguiendo otras provocando la proliferación de especies de las cuales las extintas se alimentaban.
Todas y cada una de las especies de plantas y animales juegan un papel relevante en el ecosistema para mantener el equilibrio de la naturaleza.
En este planeta dependemos unos de otros, de una u otra forma, todos estamos relacionados.
Mundo desapercibido
El paisaje lo conforman valles, montañas, nevados, volcanes, lagos, ríos, mares, vegetación, animales, minerales, el cual muchas veces pasa desapercibido.
Donde quiera que miremos existe vida invisible a nuestros ojos, por ejemplo:
Al mirar un árbol vemos un tronco, ramas y hojas, sin embargo, este además de brindarnos oxigeno y sombra, es el hogar de aves, ardillas y microorganismos que hacen parte de él.
Esa ardilla a su vez es la responsable de que crezcan nuevos árboles al olvidar donde entierra sus semillas.
Si observáramos un poco más lo que nos rodea podríamos descubrir un mundo maravilloso rebosante de vida.
Es triste que no apreciemos la perfección de nuestro planeta y más triste aun es que lo estemos destruyendo, ya que no tenemos un planeta B.