El calabacín es una calabaza de verano que a menudo es considerado como un vegetal, aunque botánicamente se clasifica como una fruta.
Es rica en fibra, potasio, manganeso, luteína, zeaxantina, vitaminas A, C, B6, carotenoides, antiinflamatorios y antioxidantes, los niveles más altos de estos últimos se encuentran principalmente en su cáscara.
Las variedades de calabacín van desde el color amarillo intenso al verde oscuro.
Pueden llegar a crecer hasta un metro, pero por lo general es recogido cuando mide alrededor de 20 centímetros cuando tiene un mejor sabor.
Al consumir calabacín ya sea crudo, cocinado, en sándwiches, ensaladas, sopas, guisos, alimentos horneados ayuda con:
– El sistema digestivo.
– Puede estabilizar los niveles de azúcar en la sangre y reducir el riesgo de diabetes tipo 2.
– Bajar la presión, el colesterol y otros factores de riesgo para enfermedades cardíacas.
– Contribuye a la salud de los ojos, próstata, huesos y tiroides.
La receta, paso a paso, de unos deliciosos palitos de calabacín y una salsa acompañante para sorprender a familia y amigos en https://www.recetasdesbieta.com/palitos-de-calabacin/.
Fuentes: foodrevolution.org, healthline.com.