La dorsal Mesoatlántica es una cordillera submarina, la más larga del planeta, que va por el suelo del océano Atlántico de norte a sur.
Fue descubierta en 1872 cuando estudiaban la viabilidad de la primera línea transatlántica de telégrafos.
Las cordilleras submarinas se forman por el movimiento de placas tectónicas y erupciones volcánicas submarinas, cuyo magma al enfriarse produce nuevo material, con lo cual se añaden centímetros cada año.
Parte de ellas sale a la superficie en forma de islas.
Estas cordilleras son fundamentales en la expansión de la corteza oceánica, la separación de continentes, otros procesos geológicos y en la redistribución de la energía térmica en el interior de la Tierra.
Dorsal Mesoatlántica
Es la cadena montañosa más grande del planeta, se extiende por el océano Atlántico desde Islandia hasta el sur de África.
Tiene alrededor de 16.000 km de largo, la altura mínima es de 900 metros, pero su promedio es de entre 1.000 y 3.000 metros y de ancho mide 1.500 km.
Esta zona es clave, ya que en ella se forman nuevas placas y también porque es la frontera de placas más extensa del planeta. Allí están los límites de las placas Norteamericana, Sudamericana, Eurasia y África.
El interés científico, además de los procesos geológicos ya mencionados, es por la diversidad de la vida marina que albergan.
Islas
La dorsal Mesoatlántica en algunos puntos sale a la superficie formando islas.
En la parte norte están las islas de Islandia, San Pedro, Jan Mayen y Azores. Mientras que en su parte sur se encuentran las islas Santa Elena, Bouvet, Ascensión, Gough y Tristán De Acuña. Todas ellas de origen volcánico.
Datos interesantes
Hay algunos datos interesantes en torno al dorsal Mesoatlántica que merecen ser mencionados.
1. En el centro del dorsal, cerca del Ecuador, se encuentra una fosa estrecha y muy profunda llamada fosa de Romanche con 7.758 metros de profundidad. Esta fosa dibuja una línea horizontal imaginaria en la cual los bordes de la costa nororiental de Brasil y los del golfo de Guinea encajan entre sí.
2. Un movimiento de placas hace 300 millones de años dio como resultado un supercontinente llamado Pangea que agrupaba toda la tierra del planeta.
3. Luego, producto del movimiento de las placas tectónicas, Pangea se fracturo dando como resultado el surgimiento de los distintos continentes.
4. Esa línea imaginaria mencionada en el punto 1 indica que América y África estuvieron unidos.
5. La actividad de esta dorsal hace que las placas Norteamericana, Sudamericana, Eurasia y África se muevan y se separen. Debido a esto el océano Atlántico es cada vez más amplio.
Seguimos conociendo nuestro planeta y estoy segura que todavía nos falta mucho por descubrir.
Fuentes: sites.google.com, lifepersona.com, geoenciclopedia.com, academia-lab.com.