Los ritmos circadianos afecta a la mayoría de los seres vivos como plantas, animales y microbios estableciendo los períodos de vigilia y sueño.
En la anterior entrada, sobre la memoria de árboles y plantas, se mencionó el ritmo circadiano, por lo tanto, me parece oportuno profundizar en este tema.
Definición
Según la Real Academia de la Lengua la definición de circadiano es: “Perteneciente o relativo a un período de aproximadamente 24 horas. Se aplica
especialmente a ciertos fenómenos biológicos que ocurren rítmicamente alrededor de la
misma hora, como la sucesión de vigilia y sueño”.
El ritmo circadiano por su parte es un ciclo natural durante el cual el cuerpo experimenta cambios físicos, mentales y de comportamiento en un lapso de 24 horas.
Reloj biológico
La mayoría de los ciclos circadianos están sincronizados con un reloj biológico principal localizado en la región del cerebro llamada hipotálamo.
Animales vertebrados, dentro de los que se cuentan los seres humanos, tienen este reloj biológico conformado por un grupo de alrededor de 20.000 neuronas que forman una estructura llamada núcleo supraquiasmático que recibe información a través de los ojos.
El reloj biológico emiten señales que viajan a diferentes partes del cerebro que responden a la luz cómo la glándula pineal. Ante la luz esta glándula suspende la producción de melatonina.
La melatonina es una hormona responsable de la sensación de somnolencia, por lo tanto, después que oscurece los niveles de melatonina en el cuerpo aumentan produciendo sueño.
Un ritmo circadiano relacionado con la luz es el que hace que se duerma de noche y se esté despierto de día.
En el cuerpo diferentes sistemas siguen ritmos o ciclos circadianos, además casi todos los órganos y tejidos tienen relojes biológicos.
Los ritmos circadianos también afectan la temperatura corporal, la energía y el apetito.
Trastornos en ritmos circadianos
Estos ritmos son los responsables de sentir sueño o hambre a una hora determinada cada día.
Cambios o interrupciones en los ritmos circadianos provocan trastornos en la salud. Entre ellos: digestión, hábitos alimentarios, temperatura corporal, liberación de hormonas.
Sin embargo, la mayoría de las personas nota el efecto del ritmo circadiano en los patrones del sueño como:
1. Trastorno del sueño. Insomnio, o sea que no se puede conciliar el sueño en los horarios acostumbrados, se queda dormido en momentos inapropiados o duerme demasiado.
El insomnio puede ser provocado por la somnolencia diurna que es cuando se duerme durante el día en siestas numerosas. Esta tiene como consecuencia la falta de concentración, irritabilidad y depresión.
Recomiendan buscar ayuda profesional ante los primeros signos de somnolencia diurna.
2. Adelanto de fase. Por lo general las personas a partir de los 60 años empiezan a tener un patrón del sueño donde se van a dormir más temprano, lo que lleva a que despierten más temprano.
3. Retraso de fase. Se trata de la dificultad de iniciar el sueño a la hora acostumbrada, por lo que se duerme más tarde y al día siguiente se le dificulta despertarse a la hora que debe levantarse, lo cual da como resultado disminución en el período del sueño.
¿Cómo se afectan?
Factores ambientales al igual que cambios en el cuerpo pueden ocasionar que el ciclo natural de luz-oscuridad no esté sincronizado con los ritmos circadianos cómo:
– Cambios o mutaciones en ciertos genes pueden afectar los relojes biológicos
– Trabajo durante la noche que cambia el ciclo luz-oscuridad
– En la noche la luz de dispositivos electrónicos puede confundir los relojes biológicos
Los anteriores pueden ser los causantes de trastornos del sueño, trastorno afectivo estacional, diabetes, obesidad y depresión.
A grandes rasgos estos son los ritmos circadianos y la forma en que afectan la vida diaria de los seres vivos.
Fuentes: nigms.nih.gov, definicion.de, webmedy.com, cancer.gov, nichd.nih.gov.