El calzado cubre y protege los pies, por lo tanto es importante hacer una buena elección al momento de comprarlos y seguir recomendaciones para solucionar algunas situaciones.

En el caso de las mujeres, por el uso de tacones y porque tendemos a usar zapatos que no son los adecuados (todo por la moda), tendemos a sufrir de ampollas, molestias y los dolorosos juanetes.

Los hombres y los niños van a tener otro tipo de situaciones para las cuales también hay soluciones.

Recomendaciones

Al comprar calzado se miran estilos, materiales y colores, sin embargo, existen otros puntos a tener en cuenta para garantizar comodidad.

Los expertos hacen recomendaciones para todos en general y algunas para las mujeres en particular.

– Lo ideal es comprar zapatos en la tarde cuando los pies pueden estar hinchados por el trajín del día, así se asegura que es del tamaño adecuado.

– Las mujeres que usan zapatos de tacón alto en la vida diaria deben tratar de cambiar la altura del tacón y usar tacones de diferentes tamaños en el transcurso de la semana.

– Cambiar la forma en que se colocan los cordones a los zapatos para ejercer menos presión y tener mayor comodidad.

– A medida que envejecemos los  pies se anchan y se alargan, por lo que la talla del calzado cambia, de ahí que se deban medirse los pies con regularidad.

Ensanchar

A pesar de seguir las recomendaciones anteriores y empezar a usar los zapatos, algunas veces se sienten un poco apretados y por ende incómodos. En ese momento buscamos formas para ensancharlos y poder lucirnos sin molestias.

Por lo general, lo primero que se hace es introducir papel periódico dentro del calzado y colocarlos en el congelador, pero existen otras alternativas para lograr este objetivo.

1.  Bolsas plásticas: En la parte donde se necesita ensanchar se introducen dos bolsas plásticas de cierre adhesivo llenas con agua hasta la mitad. Luego se llevan al congelador, así el agua a medida que se va congelando ensancha los zapatos.

2.  Papas: Para este fin se buscan papas de un tamaño que alcance a llegar hasta las puntas de los zapatos, que entre a presión, sin ser demasiado grandes para que no los deformen. Se dejan allí toda la noche.

En cuanto si pelar la papa o dejarla con la cáscara hay discrepancias, así que ese asunto lo decide cada uno. Si llega a quedar algún residuo dentro del zapato se limpia con un paño limpio.

Como dicen que la papa absorbe malos olores cumpliría una doble función.

3.  Secador de cabello: Lo primero es colocarse medias gruesas, luego se ponen los zapatos y con la ayuda del secador de cabello, a temperatura media, se calientan los zapatos por uno o dos minutos y se espera hasta que estos se enfríen para quitárselos.

Calzado de cuero

El calzado de cuero requieren un cuidado diferente a los de otros materiales, ya sea para sacarle brillo, eliminar grietas y rayones.

– A zapatos y artículos cuyo cuero está envejecido se les da brillo y se suavizan las grietas al aplicarles una capa de aceite de oliva, se deja por 30 minutos y luego se limpia cualquier exceso con un paño suave.

– Artículos de cuero se limpian con un paño empapado en leche, se deja secar y se pule, esto además de dar brillo puede ayudar a sellar grietas y rayones.

– Los rayones en zapatos de cuero desaparecen al pasarles un hisopo empapado en alcohol e inmediatamente después limpiar con un trapo absorbente.

– Después de brillar los zapatos se les aplica una capa ligera de laca para el cabello para que ese brillo dure por más tiempo.

Soluciones curiosas

Al preparar los temas para las entradas investigo en diferentes fuentes para tener mayor variedad de información y siempre buscando el cuidado del medio ambiente, además de que sea práctica y económica.

Así fue como me topé con consejos curiosos y hasta un poco locos para solucionar o mejorar algunas incomodidades relacionadas con el calzado, que al parecer funcionan muy bien.

• Si se usan tacones, para caminar de manera más cómoda, se juntan y envuelven el tercer y cuarto dedo (empezando a contar desde el dedo gordo) con cinta adhesiva. Esto alivia la presión causada por un nervio sensible que se encuentra entre estos dos dedos.

• Una alternativa económica y más cómoda para las almohadillas de gel son las toallas higiénicas, entre más gruesas y acolchadas mejor, también ayudan a absorber el sudor de los pies. Se aconsejan especialmente para botas y botines.

• Lijar la suela de los zapatos nuevos evita que resbalen, además de darles más tracción.

• Aplicarse desodorante en barra en todo el pie evita que estos se resbalen dentro del zapato y ayuda a reducir las ampollas producidas por el roce en partes como el talón.

• Zapatos nuevos o los que rozan con la piel pueden causar ampollas, para evitar la fricción que las causa se aplica bálsamo labial en el área.

• El bálsamo labial mantiene los cordones de los zapatos de los niños en su sitio cuando luego de atarlos se frota sobre ellos.

• A los pequeños se les facilita calzarse si se pega una calcomanía en la parte de interna del zapato, de manera que al ponerlos juntos, queden una al lado de la otra.

• Colocar bolsas de té usadas y secas dentro de los zapatos, durante la noche, elimina los malos olores.

Siguiendo estas recomendaciones se Reduce el uso de químicos y el calzado dura más, ambos buenos para el medio ambiente.

Fuente: wiivv.com, kidspot.com.au, health.com.